La nueva Ley de Bienestar Animal conlleva varios cambios aplicados a las mascotas: cuales están autorizadas como para tener en viviendas y cuales están prohibidas de tener.
El consejo de Ministros aprobó un nuevo proyecto de ley para proteger el Bienestar Animal. Al detallarse que animales estarán protegidos, así mismo otros animales quedan prohibidos:
- Conejos y roedores: hámsteres, conejos, chinchillas y cobayas.
- Tortugas: existen especies protegidas y vulnerables.
- Arañas: son peligrosas porque pueden transmitir enfermedades contagiosas para los humanos.
- Erizo: es considerado como un peligro para otras especies autóctonas.
- Cerdo vietnamita
- Reptiles tóxicos: iguanas, camaleón, serpientes, geckos, u otros reptiles en las categorías de especies no autóctonas.
- Aves: periquitos, cotorras o agapornis.
Los animales más comunes en España son el perro, el gato y aves pero aquellas personas que prefieren tener animales exóticos deben revisar esta nueva Ley. Esta nueva Ley tiene como fin preservar el equilibrio del medio ambiente, ya que, de lo contrario, podrían verse afectadas las especies autóctonas. Se debe tener mucho cuidado por su profusión.
Así sucedió con la especie de las cotorras. Las cotorras comenzaron a ser mascotas de colores chillones y con mucha gracia hasta que una sola persona decidió soltarla y hoy en día es un gran problema ecológico por la amenaza que supone a las especies que ya tenemos.
Actualmente, las especies que hoy en día se consideran una plaga vienen desde la antigüedad porque en algún momento por imprudencia de los ciudadanos fueron introducidas ya sea por contrabando o por mascotas. Especies invasoras: las ratas, los ratones o las cabras. Ahora el gran problema es que han proliferado grandes extensiones en poco muy tiempo.
La norma señala que aquellos animales permitidos, deben cumplir unos comportamientos: fácil de atender en cuanto a su ambiente, su comportamiento y sus necesidades fisiológicas. Deberá haber datos científicos sobre el manejo del animal en cautividad y que no sea un peligro para las personas por su agresividad y se pueda escapar o abandonar, para evitar que se colonice.